"SOÑABAS QUE ERAS AIRE, SOÑABAS QUE VOLABAS Y HOY... QUIEN SUEÑAS SER?”


Argumento de la obra:

Juanita, una niña de 7 años, descubre un mágico lugar donde patos y garzas tienen tanta vida como nunca hubiera imaginado…hablan, cantan y hacen muchos chistes.
Estando en la clase de música de la laguna encantada son interrumpidos por una misteriosa hada de la noche (que con música de Tchaicovsky), les anuncia que Alfonso está en peligro.
Es que el elefante Alfonsito, (el más pequeño de los alumnos), al no encontrar con que soñar…en la noche, mirando las estrellas, busca respuestas a su pesar…y estando ahora perdido…¿Quién lo podrá encontrar?
La garza Carlota, su maestra de música, junto a sus alumnos, organizan un comité de rescate para ir a la ciudad. Allí preguntan por Juanita que los ayuda y varias pistas le da.
Finalmente ocurre el reencuentro y Alfonsito feliz los abraza y les cuenta con emoción su gran hallazgo: su sueño de ser trompetista.
Gracias a su amigo, el Garzo merenguero, músico por vocación, la maestra Carlota descubre el amor y así su voz se transforma
en Arte regalando a todos su Canción del Corazón.


martes, 7 de febrero de 2012

Nuestra Propuesta Hoy:

"Una infancia feliz es un tesoro para toda la vida"

Rescatando Sueños surge como una propuesta diferente que despierta la imaginación de los niños, convocados a soñar. Manteniendo siempre el sentido del humor que los caracteriza y su necesidad de juego.
Así es como en la mitad de la obra, saltan pelotas gigantes que bailan al compás de la música y nadie se queda sin tocar. Y gracias al misterioso duende cascanueces, un humo mágico sale del balde de brilloso rostro, la historia continúa, las pelotas desaparecen y los niños vuelven al cuento que los hizo jugar.
Cuidamos en nuestra obra, dar pistas y señales para que los niños participando, se vuelvan creadores y construyan con nosotros. Por eso cuando la garza Carlota busca la puerta verde, todos se emocionan al verla primeros, y casi al unísono se escucha: ¡ahí!
Ellos descubren, siempre descubren y si tienen el espacio, siempre descubrirán.
Así como cuidamos cada detalle en nuestro trabajo, las canciones tienen un sello personal. Completan las escenas, crean climas y despertando palmas, acercan a los niños a diversos géneros musicales. Escuchan el rap de los patos, el blues de la espuma, el rock de los problemas, el merengue merengón, una canción de cuna, la balada del corazón y el vals de los sueños corona y cierra este despliegue de arte entregado a cada niño a través de toda esta bella experiencia.

viernes, 3 de febrero de 2012

Nuetra Misión:


Rescatar es recuperar del pasado algo perdido. Volver al presente algo valioso que justifique la enorme labor de la búsqueda.
Un tiempo dedicado a una tarea que tal vez lleve años, décadas y también lo más difícil del tiempo, la incertidumbre, que hará de la espera un acto de fe.
¿Cómo es volver a la vida un tesoro inasible y efímero como un sueño? ¿De qué herramientas nos valemos?
La mayor de las veces apenas si intuimos estar cerca de un montoncito de alegría que podría parecérsele. Al sueño, a mi sueño personal.
Sin embargo, en algún lugar del fondo de nuestro Ser está, sabemos que existe, sabemos que nos está esperando.
Y para sorpresa descubrimos que mucho de lo que se manifestara cuando un sueño se cumpliera, está ligado a las impresiones de la infancia. A esas instancias de puro juego, de dicha, de no-tiempo.
Hay quienes dicen que los niños hasta los dos años viven en un paraíso. Basta hacer presente la carcajada de un bebé para no dudar que la felicidad es posible. Que está siendo posible.
Allí están ellos, nuestras bocanadas de aire fresco, regalando espacios de juego donde , valga la redundancia, no se puede hacer otra cosa que jugar.
Perder el tiempo para recuperarlo.
Vivir en el mundo que soñamos sería solo una cuestión de tiempo. De brindarnos posibilidades de encuentro para celebrar, para descubrirnos queriendo lo mismo y trabajando por ello.
Porque entre lo que soñamos y nuestra realidad, solo dista un puente pequeño, que cuando lo podamos transitar, todos los caminos serán nuestros.

Pilar Llambías Directora artística y general


miércoles, 1 de junio de 2011

Trayectoria

• 2001. "Rescatando Sueños" recibiendo la aprobación de 1400 personas. Comedia musical realizada con títeres y marionetas.

• 2001. Editamos nuestro primer CD Rescatando Sueños. Componiendo la letra y música del espectáculo.

• 2002. La obra, fue seleccionada por la Fundación "El Libro" y participó de la Feria del Libro Infantil 2002.

• 2003. Fue el infantil principal de la temporada invierno del Auditorio del Pilar en Recoleta. Fue presentado como fiesta del Día del Niño en la empresa NCR, Hospital Alemán, etc..
Fue llevado a diversos colegios y teatros de Martinez, La Plata, Escobar, Campana.

• 2010 – Vacaciones de Julio 10 funciones con gran público infantil en los teatros "La Cova" – Martínez y "Auditorio San Rafael" – ver notas de prensa-

• 2011 – Fue reconocido con el PREMIO SUBSIDIO PARA GIRA – Otorgado por el INT – Instituto Nacional del Teatro.

• 2011 - Funciones privadas para colegios, Fundaciones y Empresas
• Participa del proyecto solidario SONREIR.

Otras áreas

*Shows en instituciones para niños con capacidades especiales.
*Eventos corporativos
*Eventos sociales

sábado, 15 de enero de 2011

"Rescatando Sueños" dirigida por Pilar Llambías

Rescatar es volver del olvido un “algo” pasado. Y no un algo cualquiera. Algo valioso y perdido, que justifique la enorme labor de la búsqueda.
El tiempo dedicado a una tarea que tal vez lleve años, décadas y también lo más difícil del tiempo, la incertidumbre, que hará de la espera un acto de fe.
Si fuera algo matemático o redituable, los mares estarían llenos de buques encontrando valiosas mercancías. Y muy lejos de ello, la tarea queda para los que minuciosamente reconstruyen m3 por m3 dando con el olvido del tiempo, con un mar silenciando lo que en otra realidad fuera el elixir de una época.
¿Cómo es volver a la vida un tesoro inasible y efímero como un sueño? ¿De qué herramientas nos valemos, con qué métodos investigamos?
¿Y cuál es ese sueño, que guardado dentro nuestro como el más preciado tesoro, volvería a la vida el entusiasmo en su pura esencia? ¿Y de qué sería hecho ese bien, que una vez hallado regalaría a su dueño el cese del deseo incumplido, la paz de la sonrisa?
¿Y con semejante dimensión, cómo encontrarlo? ¿Cómo no sentir estéril una búsqueda que se dilata en el tiempo sin ninguna garantía de hacer presente el resultado? Apenas a veces si intuimos estar cerca de un montoncito de alegría que podría parecérsele. Y así como vino, desaparece.
Sin embargo, en algún lugar del fondo de nuestro mar está, sabemos que existe, sabemos que nos está esperando.
Nuestros intentos nos demandan hacer algo diferente. En algún punto “desaprender” aquello que nos tomó tanto tiempo volvernos adultos.
Y no estamos atentando a los años de experiencias vividas. Muy por el contrario, justamente gracias a la madurez podemos volcar luz de conciencia a la travesía de la vida.
Y para sorpresa descubrimos que mucho de lo que se manifestara cuando un sueño se cumpliera, está ligado a las impresiones de la infancia. A esas instancias de puro juego, de dicha, de no-tiempo.
Hay quienes dicen que los niños hasta los dos años viven en un paraíso. Y yo les creo. Basta hacer presente la carcajada de un bebé para no dudar que la felicidad es posible. Que está siendo posible.
Allí están los niños, nuestras bocanadas de aires frescos, regalando espacios de juegos donde no se puede hacer otra cosa que jugar. Perder el tiempo para recuperarlo.
Vivir en el mundo que soñamos sería solo una cuestión de tiempo. De brindarnos posibilidades de encuentro para celebrar a nuestros niños internos. De descubrirnos queriendo lo mismo, trabajando por ello.
¿Quién no quisiera vivir en un mundo de ensueño? Si alguien dice que no, créanme, nunca estuvo despierto.
Porque entre soñar y despertar solo dista un pequeño puente, que cuando lo podemos transitar, todos los caminos son nuestros.

Pilar Llambías Directora artística y general